El Admirador
Desde tu mirada, desde tus labios y de tu mejilla,
que antes no veía en otras mejillas,
algo tienes, algo escondes,
que mi corazón despiertas,
las mariposas que avisan el amor y despiertan,
solo mirarte y amarte como a nadie he querido.
Te llamaba extraña, te llamaba desconocida,
antes de conocerte todo era extraño, todo era nuevo,
la sensación que me despiertas con tu rostro angelical,
de miradas que te atrapan, bien amada te llama mi corazón,
sin conocer la grandeza y enorme corazón que noté de tu pecho,
que la veo en tus ojos, tan bonita y buena mujer.