Cuando hablo de la lengua
al idioma no me refiero,
pero si al órgano del gusto
que tiene un poder muy fiero.
Hay lenguas que son insipidas
otras con mucho sabor,
pero todo lo que digan
tiene un un peso y un valor.
A través de la poderosa lengua
se pue exaltar a una persona,
pero también podemos destruirla
y dejarla tirada en la lona.
El poder de la lengua
es muy fuerte y desmedido
y en cuestión de minutos
en un problema nos ha metido.
Existen lenguas terribles
y son como artillería pesada,
porque para destruir a alguien
nunca se guardan nada.
La lengua es un medio
muy rápido y certero,
porque transmite un chisme
mejor que cualquier noticiero.
Nunca debemos subestimar
al que observa y no dice nada,
porque a la hora de hablar
tiene la lengua más pesada.
Alejandro Díaz Quero
Villa de Cura,16/06/2024.