El Corbán

TÚ ME COMPLEMENTAS

Eres mitad de un todo que nunca busqué,

esa pieza perdida que siempre encontré,

como un eco constante que no quise oír,

pero allí estás tú, sin dejarme huir.

 

Tus ojos me siguen, aunque quiera volar,

y, ¿sabes? Me cansa tu forma de estar,

pero, ¡ay! Si te fueras, el mundo se iría,

tan lleno de ti que sin ti no es mía.

 

Me complementas, esa es la verdad,

la ironía me asfixia en mi siniestra maldad,

pues sin ti no soy, aunque quiera ser,

y contigo, soy menos, pero he de ceder.

 

¿Sabes qué es lo peor? No poder escapar,

porque somos dos mitades en este pesar,

y aunque me revuelvas el alma sin fin,

al final reconozco, que te amo solo a ti.