Freddy Kalvo

Calambur a la rima

Me provocas poesía

al ver tu linda silueta

y yo, sin ser un poeta,

hasta el cielo te daría.

El verso que día a día

en mi conciencia reprimo

lo escribo, luego no imprimo,

porque en mi loca Tetunta

surge una sana pregunta:

¿Pero cómo te la rimo?

 

Si la rima no es mi fuerte

y la métrica, tampoco,

terminaré un poco loco

para mi muy mala suerte.

Entonces: ¿Cómo tenerte,

tan fresca como la cima

que alienta sabroso el clima?

Y si la brisa se junta

surge una nueva pregunta:

¿Será que otro te la rima?

 

Y así, transcurren mis versos,

muy dentro de mi conciencia;

y a veces, con impaciencia,

me salen versos diversos.

Si creen que son perversos

ya pronto irán comentando

y alguien quizá, preguntando,

con una justa sospecha

por doble filo que acecha:

¿Y quién se la va rimando?

 

El buen poeta la rima

utiliza en su esplendor

y versos llenos de amor,

con su pluma no escatima.

La elegancia que le imprima

a su verso bien pensado

como buen enamorado

dejará a su musa inquieta

aquel lujo de poeta

¡Cuándo bien se la ha rimado!