Lamento expresar, lo que realmente siento
Pero no puedo ocultar, mis sentimientos
A veces me detengo, porque soy irreverente
Ante el sentir de otros seres, que tienen su libertad
Sin embargo, en mi hay una libertad que empalaga
Quiero expresar, lo que hoy ante esa débil facultad
Me sale del alma y alivia mis penas, aunque largas
Tal vez cuestionadas por su propia inconformidad
Me confunden algunas reacciones humanas
Las que no justifico por lo grotesca de las mismas
Que mas bien, del demonio parecen pinceladas
En las que, diabólicamente impregna su tinta
Cuando observo, abismado una piel tatuada
Que parece eximirse de el confort de la vida
Me resulta una cruel y lamentable bufonada
Que ofende a quien la lleva o aquel que la mira
Es como, si la piel despidiera desagradable Halitosis
O un rechazado ruido, en la armonía del cosmos
Que conspiran, con los patrones de la lindeza
Y se revelan unidas, como un mismo demonio
Aunque con finos arabescos, sean diseñadas
La piel humana, nunca podrá ser un lienzo
Donde se produzcan obras finamente acabadas
Porque es tan solo, la hermosa capa del cuerpo