Sentir sin dudar,
Reír sin parar,
Volver a empezar,
Soñar sin cesar.
Vivir cada instante,
Buscar lo importante,
Dejarse llevar,
Y nunca mirar atrás.
Crecer sin temer,
Correr sin frenar,
Escuchar el silencio,
Y aprender a volar.
Brillar sin opacar,
Sonreír sin pesar,
Tejer en el viento
Un lazo de amistad.
Confianza y paz
Amar sin vacilar,
Dar sin vaciar,
Confiar sin exigir,
Abrir sin sufrir.
Ser luz en la sombra,
Tejer sueños en el aire,
Sostener con ternura
Las caídas del viaje.
Sentir cada latido,
Honrar lo compartido,
Navegar en el tiempo
Con el alma encendida.
Acariciar el dolor,
Transformarlo en canción,
Encontrar en las heridas
La esencia de la unión.
Cultivar la esperanza,
Regar la comprensión,
Y abrazar en silencio
Las verdades del corazón.
Quiero estar donde es una elección y no una obligación,
donde el alma se eleva,
y la risa es canción.
Donde el tiempo se detiene,
y el amor es sincero,
donde cada paso dado
es un viaje ligero.
Quiero estar donde las palabras
fluyen como el río,
donde los sueños se abrazan
y se siente el rocío.
Donde las miradas hablan,
y los corazones brillan,
donde la vida se vive,
y las penas se destilan.
Quiero estar en ese rincón,
donde lo simple es profundo,
donde cada elección hecha
teje un nuevo mundo.
Donde la libertad danza,
y el ser se siente pleno,
donde cada latido resuena
como un eco eterno.!
Que lo vivido sea experiencia,
y no una etiqueta que pese,
que cada paso en el camino
se convierta en un abrazo que crece.
Que las cicatrices nos cuenten
historias de valentía y luz,
que cada caída nos enseñe
a levantarnos con más virtud.
Que el pasado se abrace al presente,
sin cadenas que limiten el ser,
que cada error sea un maestro,
y cada acierto, un amanecer.
Que el amor sea la brújula,
y la esperanza, el motor,
que lo vivido nos inspire
a vivir con más pasión.
Que cada instante sea un regalo,
una lección de gratitud,
y que lo que hemos recorrido
nos guíe hacia la plenitud.