Esa fuerza del destino,
que arrastra a los más valientes
en esa relación anímica,
de transferencia
ante el Logos.
Bendito que sea aquel que ama,
los amores líquidos en su punto más alto,
los amores de eterno retorno
los amores de paréntesis
con el vértigo de la pasión.
¡El sublimo absurdo!
gran vinculador y desligador
ficción que cura el vacío
Un miraculum per gratiam Dei;
Hay amores del tiempo
que se ubican en el olvido-recuerdo;
bajo los días, los años, las estaciones,
y de lo que hace el amor al amor.
Hay amores de los cuerpos
que te acallan en el palacio de la fantasía
cuyo fuego largo y ávido
yendo más allá de la ley
cuando se acaba la noche.
y hay amores migratorios,
que hacen del amor un problema.
Droh Joël Arnauld Keffa