La identidad tiene un costo
Saber que todo tu ser es nocivo
Y a pesar de eso ocultar las heridas
Es verdad que hasta en la impaciencia exista calma
No existe casualidad en los puntos cardinales
Somos personas haciendo cosas
Y es tan gracioso obtener el resultado contrario
Las hojas se las llevó el viento
Tan preciosa puede llegar a ser la paz
Buscando ir al norte de las emociones
Conocerse a sí mismo es saber cómo sentirse
Y nadie da lo que no tiene
Quizás me acostumbré a lo mínimo en la cantidad
O que la caricia sea áspera como piedras volcánicas
Y se aprende a vivir
Se aprende a masticar el presente y a dar las gracias
Por el solo hecho de también desear la paz
Entonces el nacimiento de otra identidad tiene tatuada otra rebelión
La de moverse en libertad
La de tomar decisiones propias
Cuántas miradas de odio tiene este presente
Que ya no sé si se cae o desvanece