Somos amantes
de los motivos
que saben a amor,
esos amantes
que persiguen
lunas y detalles.
Amantes de lo bello,
de esos que aman
con fuerza extraña,
no de aquellos
que destiñen el amor,
somos aquellos
que moriríamos si
desapareciera.
Somos amantes
del verbo amar
aquel que suena
a destino floral
como un paraíso
en el que todos
sueñan estar.