Tengo nostalgia de sueños incumplidos,
de amaneceres hermosos,
de calma en el tiempo,
y de promesas ilusas y rotas
Echo de menos tu omnisciencia,
tu mirada, tu llama inflamable,
tu caustica dormida y tu imperatoria sonrisa.
Nostalgia de mi inocencia,
de mi juventud, de creerme inmortal,
indomable y de ser capaz de amar hasta el ultimo fuelle.
Nostalgia de la creencia por otro lado absurda,
de poder llegar más lejos que nadie,
de vivir al día y de respirar el aire como si fuera el último,
de vivencias únicas y de esperanzas fatuas.
Tengo nostalgia de ti, de tu locura,
libertad de ver y amar,
y de mi mismo, un ser que emanaba curiosidad
perplejidad y asombro por todo.