Disfruta, encantadora libre de cada instante. Mereces lo mejor de cada momento.
Tu sonrisa preciosa llena de alegría y tu cuerpo, como una diosa fluyendo del mar.
Eres la realidad más bella que puedo imaginar.
Tus manos me derriten de locura, tan suaves como la brisa que acaricia la piel de mi espalda.
Aunque sé que no te merezco, cada reencuentro después de tiempo sin vernos es más especial. Al menos, es lo que yo siento, aunque no tiene porqué ser igual para ti, pero super feliz si es que sí.
Ojalá pudiera susurrarte al oído mientras sueñas y volar contigo sin dudarlo. Entrar en un viaje a nuestros cuerpos, comprendernos con un gesto, una mirada, un guiño ardiente.
Lograr que cada momento que pasa sea un poquito más de puro amor salvaje y explosivo.
Por miedo a perderte o por ganas de tenerte cerca, no dejarme nunca estancar, sintiendo siempre cosas nuevas y contigo poderlas experimentar, porque sé que queda mucha mecha y casi todavía no acaba de empezar.