Cada momento que pasa
yo te siento junto a mí,
pues por ti, pude vivir
pleno de dicha y de calma;
eres la divina llama,
la presencia más sutil,
la razón de ser feliz
llama que nunca se apaga;
eres dueña de mi amor,
invisible paraíso,
suprema felicidad;
vives en mi corazón,
siempre estarás conmigo
y por siempre te he de amar...