Recurro al silencio de un lugar solitario
cada vez que me extraño con mis labios empezando a moverse
y una duda retiene el presente.
La vista del mundo se encoge aquí enfrente
sintiendo su pulso como un muerto de siempre
mientras fuera en la noche las luces se encienden.
Me cansé de hacer un papel que conmigo no va
de tanto estando en mi carne
incapaz de volar con todo el resto mirándome.