Milber Fuentes

Costuras de la realidad dualidad de la frialdad y el Sueño

Hoy atestiguo:

he drenado mi vida de todo aquello,

lo que no fui, lo que se disfraza.

Su señoría, me declaro culpable,

culpable de la ausencia de inocencia,

soy fragmentos de lo que quedó de mí.

Dividido en partes ínfimas:

para los días de mares dorados,

las multitudes, el tumulto,

y las noches largas, llenas de sueños

donde el insomnio cosecha mi ruina.

Parte de mí es el frío que entiendo,

que analiza la realidad sin tocarla,

sin las manos que la corrompen.

La otra mitad, es suya,

dueña de todas mis fiestas,

compañera de tierras siempre verdes,

que ofrece cada pétalo,

en ese jardín fértil donde,

sin culpa, las pisadas ajenas

crujen los tallos que guardan mi esencia.