jarablanca

Diluvio de lluvia y miedo (jarales)

Diluvio de lluvia y miedo 

En la acera de enfrente mientras diluvia,
algo se está moviendo bajo la lluvia. 
Me tiemblan las piernas,
¡Qué mala fortuna!
Tengo tres linternas...
¡No enciende ninguna!
Y tan pronto se muestra... ¡desaparece!
antes de poder verlo se desvanece.

Gritos de escalofríos rompen la noche
y yo de taquicardia hago derroche.
Parece que todo
es una amenaza,
y no encuentro el modo
de cruzar la plaza.
Y tengo tanto miedo... parezco un palo,
en un charquito de agua salto y resbalo. 

Mis dientes castañean ¿¡será de frío!?
El sudor en mi cuerpo formando un río.
No puedo con esto
la noche es oscura, 
si no acabo presto
vendrá la locura. 
Veo dos pares de ojos, ¡me están mirando!,
¡en mi cabeza el pelo se está erizando!

Corro por la avenida atrás no miro,
a dos mil por minuto aire respiro. 
Cielo encapotado,
me falta el aliento
y tengo mojado
hasta el pensamiento.
Mirando de reojo a la otra acera,
hay sombras que se mueven, mi cara es cera.

Me paro y me pregunto: ¿¡Soy tan cobarde!?
De repente mi rostro sonroja y arde.
Tengo que volver,
he de ser valiente,
lo tengo que ver,
relajo mi mente.
Desandando el camino vuelvo a la acera
donde escuché los gritos por vez primera. 

Andando por la calle muerta de miedo...
Una rata me asusta, ¡ay, no, no puedo!
¡No seas miedosa!
-me digo enfadada-
murmuro llorosa:
venga que no es nada...
Cuando miro se quedan mis ojos chatos,
¡detrás de los arbustos riñen dos gatos!