Ningún sufrimiento es dulce,
Más, soportar el dolor,
Al adolorido conduce
A un sentimiento mejor.
A veces el sufrimiento
Es mal buscado, señores,
Por exceso de contento
Al degustar mil sabores.
Sufre el alcohólico cuando
Disfruta solo una copa
Y el alcohol acumulado
En sus tejidos lo aloca.
Cuando el envidioso sufre
Es porque carcome el hueso
La envidia, pozo de azufre,
Del que nadie sale ileso.
Qué sufrimiento se siente
Cuando nos duele una muela.
Yo soy aquella paciente
Que suele darse la pela
De visitar al dentista,
Que, aplicando la anestesia,
Arregla como un artista
La muela a un ratón de iglesia.
Hay dolores, hay dolores,
Que se pueden soportar...
Pero, hay dolores, señores,
Que pueden hasta matar.
Ningún sufrimiento es dulce,
Él siempre causa dolor
Con su sabor agridulce,
Entre el odio y el amor...