José López Moreno.

Paloma.

Por el mar de lo divino

en un velero de perlas

viaja una paloma blanca

con su vestido de seda.

 

Con su atuendo de pureza

con la alcoba perfumada

va dormida la paloma

mientras las gaviotas pasan.

 

Ya pronto llega a la orilla

en arena de fino nácar

la esta esperando el palomo

con un ramo de gladiolos.

 

Juntos como nieve blanca

con sus flores como abrigo

con el aire de testigo

vuelan a su eterno nido.