Si el hacer algo
sirviese para algo
algo haría
pero por mucho que haga
muero día a día.
El hacer nada
nada vale
por ello no hago nada
porque aunque algo haga
muero a cada instante.
No estoy obsesionado
no lo estoy con la muerte
lo que estoy es cabreado
por padecer una vida
con el premio de la muerte.
Dando gracias cada día
debo a la vida aferrarme
ocultando como un velo
como si fuera un tesoro
lo que resulta imparable.
No, no estoy obsesionado
son momentos muy puntuales
fruto de la incomprensión
que acompaña a la amargura
del pensar que nada vales.
De una cosecha de trigo
para animales y personas
se aprovecha paja y grano.
Quién es el beneficiado
de la vida del humano?
Pasando por este mundo
tengo ratos agradables,
esos de risa y cariño.
Quizás sea el estímulo
para soportar el viaje.