RESENTIMIENTOS
Hay dolores irremediables,
heridas recubiertas,
culpables extraviados,
solo recuerdos, ecos de sombra en un desierto de luz.
El dulce sentimiento asolado
abraza mi ira como un abrigo tejido con espinas;
aunque olvide ofensas pasadas,
mi calma se agita, como piedras en un río.
Una amargura extraña
es prisionera de mi bondad,
cada instante la acompaña,
mirándome con ojos de tormenta en un cielo despejado.
No queda mucho sobre mi pie,
solo tengo un corazón marchito;
no sé por quién, ni por qué,
pero guardo un odio infinito,
mis sueños son hojas secas arrastradas por un viento olvidado.
Corazón Bardo ©