Marianela Soto Moncada

ELOCUENCIA

Desde aquel día horrorosamente triste
En que un abrazo selló para siempre
Nuestro (inocente) amor indescifrable
La vida camina lejos con su pesada maleta

Ya no estás y desconoces cuánto duele
A mi pesar el tiempo desdeñando relojes
Horas rotas, minutos malheridos
Y bajo la tierra mis raíces enredadas a tu recuerdo

En la ausencia innumerables manos te buscan
Distintas voces proclaman tu nombre
¡Te he pensado y escrito tanto!
Que mis palabras tienen de frío
La elocuencia dormida

 

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