Vuelvo a amarte cada noche
bajo las sombras y el silencio.
Vuelvo a subir por tus sábanas
como se remonta el azul del tiempo.
Vuelvo a atrapar tu desnudez
y a enredarme en todos tus besos,
vuelvo a ser parte de tu todo ser,
de tu piel, alma, carne y huesos.
Vuelvo a escuchar tus palabras
y a conjugar con mis labios tu verbo.
a morder tu manzana ya desnuda
y a ser causa de quejidos y lamentos.
Vuelvo a amarte cada noche,
mientras duermes y yo sueño.
amarrado a tu breve cintura
y perdido entre aromas sin tiempo.