LA DANZA DE LA LUCIÉRNAGA
En la noche serena, donde el silencio reina,
una chispa pequeña despliega su luz plena.
En la sombra constante, su fulgor es día,
un farol que guía, renovando la vida.
Luz que me orienta por senderos inciertos,
en este mundo amplio, tan lleno de sueños.
En la oscura inmensidad, su luz es melodía,
un destello de esperanza que el alma acaricia.
En la sombra densa, donde todo se esconde,
la chispa resplandece, y la noche responde.
Con su magia sencilla, transforma el paisaje,
la jornada se convierte en un hermoso viaje.
Cada luciérnaga es un susurro de vida,
en la grandeza del ser, una luz decidida.
Pequeña errante, en su camino, solitaria,
ilumina el sendero con su luz extraordinaria.
Y así, en la noche, danza y flota,
pequeño farol, bajo la luna que brota.
Guiándonos por caminos de alegrías,
en este mundo oscuro, déjame los días.