FRANCISCO CARRILLO

lloraré.

Con pudor pero seguro

de oír el llanto de otro,

pienso que ya queda poco

que oigan el mío otros muchos.

 

Y por tanto lo sospecho

que de cerca lloraré,

porque siento el padecer

en la garganta y el pecho.

 

Por lo tanto no me escondo

porque llorar ya está hecho

y mi mal, lo siento hondo.

 

Y si lloro, y se que es cierto

que llorar es desahogo

y alivia mi sufrimiento.

 

Y si pecar he pecado

el castigo lo soporto

y lloraré lo que pronto,

he de pagar por salvado.

 

Cual pecador, se condena

con dolor y con su llanto,

que me alivia estar llorando

y pagar tanto que deba.

 

Que justicia habrá mas justa?

que llorar arrepentido

por no volver a pecar.

 

Que pecados cometidos?

no se pagan con llorar

ni se dejan al olvido.

 

Con pudor, pero seguro

he de llorar como un niño,

y mi llanto habrá sido

el perdón que siempre busco.

 

Hoy si lloro, fue que ayer

no pensé que era pecado,

hoy de nuevo volveré

a sentir todo lo malo.

 

Y mi alma llorará

por el perdón tan ansiado

por tener al fin, la paz.

 

Que pequé, eso esta claro

y por eso he de llorar

hasta quedarme extasiado.

 

Lo siento... he de llorar.