La sed de lectura de tus versos, atraviesan mis alegrías y todo se torna del gris a la oscuridad
Opacando mis sueños tras la fuerza de esta realidad que se impone a mis anhelos y esa ansia por ti, que siempre despiertan tus ausencias, cuando buscas liberarte de la fuerza de mi corazón
Mordiendo el pecho, haciendo sangrar mis alas, destrozada al igual que mi alma y mis sueños.
Esta sed alucinante de la necesidad existencial de ti, de tu imagen y sobre todo de esos versos que entrar por mis ojos para recorrer todas mis emociones y estacionarse en el corazón, coqueteando con mi alma, desvelando los posibles sueños y acercarme a la demencia poética, que hacen que mis pocas letras s e pierdan en la mar de tu alfabeto, que me llama y no encuentro su voz.
Casi todos dicen que los ojos son el espejo del alma, otros piensan que solo es la extensión de un campo de guerra, entre los sueños y esperanzas, que luchan entre lo prohibido y lo deseado, Miradas punitivas que solo esperan que aparezca como todos los días y a la misma hora con la luz encendida, esperando el asalto al corazón, para que enciendas las luces del alma… luceros del cielo nuestro.
Er en la lejanía de tus versos y mis letras que, al no tenerlas, me hieren. Es la luz que ilumina mis sombras, que s e pierden en la sentida nostalgia que suspira en el espejo del alma, que convierte la mirada en dos fieras dagas, que rasgan este poema por la esquina del alma sedienta, que su sed no calma y que, en la espesura de mis deseos. No quiero que la ultima gota del tintero se seque y sangre
La esperanza es el escudo que llevo para defenderme de tus ausencias. Mírame, escríbeme, hazme parte de tu mejor verso, rompe las metáforas que me esconden. Llamemos al amor por su nombre a la esperanza como una realidad operante, sigue siendo por favor esa luz que ilumine mis sombras, visita mis lugares más tristemente oscuros de mi alma y e ilumínalos con esa fuerza que nos proteje
LENNOX
EL QUETZAL EN VUELO