OscarCampos

Sombra

 

 

Li camina hacia la ventana de su dormitorio, buscando la profundidad del amanecer. Afuera, el despertar revuelto de la ciudad toma un ritmo instintivo. Distinto a sus pensamientos que regresan distraídos.

Observa a una pareja joven jugando con momentos espontáneos de amor. Sus manos no se sueltan mientras se apresuran para alcanzar el bus de la mañana. Piensa en Clau, que regresa de manera bestial para quebrar su tranquilidad con las nubes descoloridas de un amor interrumpido por el bullicio del entorno y no buscar un espacio de silencio para escucharse. ¡Cuanto hiere el pasado cuando se eleva del olvido!

Li se pregunta si los instantes perdidos continuaran llegando con el otoño y fantasmas de sus hojas amarillas que la brisa le arrebata de su olvido, pero que aún caen en su corazón.

 

Afuera

como hojas débiles desprendidas

los recuerdos del pasado

se amontonan

otras siguen un camino perdido.

 

Una llama

se enciende por una sombra

o una silueta fantasmal

quema como alfileres

solo se apaga sin tiempo.

 

Su amor fue un encadenamiento

de fragmentos

sin eslabones que le coloca alas

ahora le quedan imágenes pasajeras

y el eco de las palabras.

 

En cada esquina de tu memoria

encuentras células dispersas

de un amor que nunca brotó

ahora

la memoria te lleva

a las huellas de un amor

perdido.

 

¿Existe un eslabón que te une?