Siempre caminé tranquilo,
pisando horas de vida,
entre el cinco, a las doce,
corriendo a ritmo de tic tac.
Peleando con la espada
del saber, contra personalidad.
El enfermo requiere conocimiento,
más, no sólo caritas de revista.
Siempre el desvelo, por el saber,
me dió victorias de sanación,
los guapos, odiando mis destrezas.
siempre traté con igualdad y dignidad,
a todos los enfermos.
Más compasión y amor al desvalido.
Abrazos de amor, son parte de la curación.
Entendí, que las heridas duelen,
con vendajes y analgesicos se calman.
El ALMA SUFRE.
escuchar y abrazar es sanación.
Compasión; no es locura,
es la inyección que le falta al mundo.
Seguiré caminado, dentro del reloj,
del reloj de arena ⏳
Ya no deseo escuchar el tic tac,
!sólo mirar, la arena caer!
Dr. Salvador Santoyo Sánchez
29/10/2024