Por qué tiene que ser todo complicado?
Por qué la vida da giros inesperados?
Por qué hay entre la vigilia y el sueño
espacios tan extraños y desconocidos…
Por qué tantos son tan poco decididos?
Por qué les importa el miedo a sucumbir?
Por qué no piensan que tal cual llegaron
con el mismo equipaje deberán partir?
Por qué te preguntas de dónde venimos?
Por qué adónde vamos quieres conocer?
Por qué, siquiera sabes dónde estamos?
Que aquí estás de paso, debes comprender.
Por qué nos hablan de un dios tan vengativo?
Por qué al final del todo tendrás que pagar?
A tan falsos profetas no debes creer amigo.
Que en el fin del tiempo nadie te va a juzgar.
Por qué no comprendes tantas cosas bellas?
Por qué no observas el mundo con calma?
Y te das cuenta que eres polvo de estrellas
Y de cambiante energía está hecha tu alma.
Para nada importan cuántas veces tu viviste,
si el porqué de ellas no pudiste comprender,
enriquecer el alma con las cosas que hiciste
es todo cuanto precisas para poder ascender.
Así es que me sigo preguntando yo el porqué
de tanta gente con una hueca existencia,
tristes vidas que cuando parta no extrañaré,
pero mientras aquí estoy, evito su presencia.
Bien largo debe ser el camino a recorrer
a lugares, que el hombre en su ignorancia,
de otro modo no llegaría jamás a conocer
ni saber de otros planos de existencia.
Si de una sola dimensión el espacio ves,
eres puntual o un ser de un mundo plano,
cuando puedes pensar en dos, incluso en tres,
entonces debes ver más allá del ser humano.
Cuando aprendas a existir más allá de tu nariz
y cuanto existe y te rodea forme parte de tí,
habrás empezado a vivir siendo un poco más feliz