Adelaine Soto Alvarez
DEJANDO DE SER.
Hundida en imágenes hurañas
Que temía a los murciélagos
Al chocar con las tablas.
Que cobijaban la choza familiar
El recuerdo es como talismán sagrado
Permanece engalanado sin cansancio
Cierro los ojos y veo el aguacero
Siento alivio de a guarecerme
Bajo este manto de tristezas múltiples
Sé que no es hora de soñar
Aunque la mente siga haciéndome sus guiños
A pesar de la lasitud y los sablazos
Que aún no doblan mis piernas.
Y grita desde lo más profundo
Por eso es que me siento viva
Ni aun estando frente
A la espiral de la muerte
Comience a exhibir sus grietas
Pletórica de cifras abominables
Recreando el pasado con el presente
Imaginando que el tiempo es de arcilla