Josué Gutiérrez Jaldin

“PIENSO Y DESPIENSO…”

 

No hay risas que por tristezas no vengan… cual tranquilidad se desmorona en lágrimas de dolor…
Desamores que van y vienen, como brisas enamoradas, cual amargura vendrá, en verdad amedrentada…
Dicen que los demonios no lloran… pero yo veo a uno… que llora en un rincón, de rabia, en carcajadas de peligro, de milagros soñados… que nunca llegaron…

Misma luna, misma noche… recordar aquella noche es un castigo divino… quisiera deshacerme de esta ceguera…
Vivo atado a un recuerdo que no logro olvidar… sigo sin poder rimar ni redundar, solo versar… palabras sin igual…

Quisiera que la Aurora se detenga un minuto… y robarle su esplendor… y saber qué se siente ser Perfecto, sin decirlo…
Solo negarlo y demostrarlo…
Detente por favor, que quiero verla por última vez y decirle cuánto la quiero…
Cronos, codicioso, serio, vanidoso… Eón de pasión y adoración…

De qué me sirve mostrarte lo sincero y profundo de mi corazón… si ni piensas en quererlo… solo juegas con él…
Pero créeme… que algún día se cansará…
Insistir y persistir es mejor que retroceder y desistir…
Todo está en juego, las cartas están bien inquietas… no hay nada que lamentar… pero… si pierdo y caigo… con él se irá y caerá… la gran pasión que te tuve y tengo…”