Será difícil estar sin ti.
El hecho es que siempre hay que salir adelante.
Quisiera que todos estuvieran en mis zapatos,
para que sientan como me siento.
Lo curioso es que ni yo sé cómo me siento,
y la frase se hace verdad:
“NADIE APRECIA LO QUE TIENE
HASTA QUE LO PIERDE”.
Tengo miedo,
miedo de querer como te quise y volver a perder.
Pero lo intentaré una y otra vez,
porque es lo que hubieses hecho.
Quisiera encontrar algo que sea mi lugar seguro,
y aunque siempre mantengo mi mente ocupada,
no hay forma que no te piense.
Y me pregunto:
¿POR QUÉ NO FUI YO?
Pero sería muy egoísta.
Mientras tanto, disfrutaré de lo que tengo.
No vaya a ser
que, por renegar y vociferar, me pierda
de lo que aún me queda.