Rechazando cada espejismo
me mezclo en Tu hondura
-Nada queda y todo perdura-
canta la ley del abismo
-Nada es igual y todo es distinto-
Si el vértigo cede a la altura
que la Presencia erija la compostura
soltando bajezas
de ruido e instinto
Para que mis sentidos
se vuelquen de veras
Y la recta obediencia
disipe cegueras
Sea la escucha en lo Eterno
la huella que forje mi camino
sea despejando el infierno
lo que defina mi destino