Nos pertenecemos…
Porque somos dos locos idealistas
perdidos en las formas antiguas
de hacer el amor entre versos y coplas.
Nos pertenecemos …
Porque somos columnas de fuego
que se rozan y crepitan en ese devaneo,
muriendo y renaciendo en cada parpadeo.
Nos pertenecemos…
Aletargados en el tiempo…
En ese enamoramiento que no sabe
de rupturas ni finales porque es perpetuo…
Y así…
Transcurren nuestras vidas,
tan lejanas y tan cercanas
donde una mirada basta
para reafirmarnos y sentir
que… Nos pertenecemos…