Yahann Romero

Desnudo a grafito

Cada vez que esbozo tu figura en el papel

acaricio lentamente

con mis ojos y mis lápices

la belleza de tu cuerpo al descubierto,

frágil en su fuerza

desprotegido en su fortaleza,

cercano en su dulce lejanía,

esa impenetrable a la que llamamos sueño.

Me pierdo en los contornos que bien conoce mi memoria.

Cierro los ojos y reconozco tus formas

con el suave manar de tu calor sobre las sábanas.

Reconozco tus sombras en medio del silencio

y las esfumo con mi lápiz y con tu aliento.

 

Sabes perfectamente que te sienta sublime el agua después de la ducha...

 

Te robo en líneas y grafito, tus ojos cerrados y tu lejana sonrisa.

Me apropio de la luz que reflejas,

me escudo en tus sombras para deleitarme de ti,

no sé si divagar en tu cerebro o tu entrepierna,

¡no recuerdo cuál me place más!

Me he vuelto adicto a la figura de tu rostro en r.e.m.

 

Quisiera extender el tiempo y dibujarte

mucho más despacio y con muchos más errores...