Noche de luna, silencio y misterio
las sombras se miran como un suave mar
la ciudad se viste de un brillo etéreo
y el tiempo se queda, sin querer pasar.
La luna se asoma, en cielo callada
su rostro es de plata, su luz un suspiro
y yo en esta calma, me siento atrapada
con el alma a tientas y el pecho en un giro.
Las calles se duermen bajo su encanto
las piedras relucen con luz de cristal
y en cada rincón, como un viejo canto
renace un recuerdo de aroma ancestral.
Noche de luna, tan honda y tan cierta
que deja en mi piel su huella fugaz
me trae memorias, me deja desierta
y luego se esconde sin volver jamás.
Camino en la sombra que ella perfuma
un paso en el viento, un paso en la paz
la luna me observa, paciente y sin bruma
como quien reconoce lo que el tiempo da.
Noche de luna, refugio y camino
me envuelves entera, me haces soñar
y aunque en el alba te pierda el destino
tu luz en mi sombra sabrá regresar!