gaspar jover polo

LAS COSAS QUE OCURRIERON

LAS COSAS QUE OCURRIERON

 

Yo iba pedaleando por la orilla

del modesto río de mi localidad,

por una senda que hacía

continuos sube y baja y que penetraba,

de repente, por un túnel de vegetación

formado por los taráis, por arbustos

altos y llamativamente frondosos.

Y en otro momento, yo

llevaba  atados a la bici a mis dos perros

altos, podencos

camino de un trozo de campo,

de campo que estuviese solitario,

al lado de un bancal de almendros

o de un productivo olivar.

Y otras veces iba a pie

y a paso rápido, con el fin

de hacer ejercicio. Y todos estos

momentos tan variados y sutiles,

tan cadenciosos, que me ocurrieron

hace ya algunos años, tienen que tener,

en su conjunto, un sentido último

que no acierto a concretar.

 

Gaspar Jover Polo