Randoc Nadino

Sueños...solo sueños...

No me creo diferente ni lo soy

y si lo soy, que lo digan los demás.

Que lo digan para bien y para mal.

Si es por bien, feliz...

Si es por mal...se asume...

lo que jamás me consume

 

¡Si quisiera consumar!

lo que es propio del amor

con pasión y con sudor

y con versos dar mi mar

con el vaho del sudar

en mil poses de placer

para darte mi querer

hasta ver que te derrites 

y contigo renacer

una vez y otra vez y otra vez, sin soñar

simplemente en un lugar donde sea

sea cariño y amistad

sea el goce que tu quieres 

y sintiera que te vienes 

sin reserva sin vergüenza

el que acaba y se comienza

otra vez y otra vez y otra vez

ver tu bella palidez

suspirando en tu oído

simplemente que te quiero

que por ti fuí renacido

y te estoy agradecido

que si muy generoso

no será por ser hermoso

la belleza y la ternura 

siempre, siempre han sido tuyas

eres piel, figura, cuerpo y talento

eres miel y la escultura de mi templo al sentimiento...

eres voz de mi sueño despierto

y la brisa fresca de mis mantos

en mis noches calurosas de quebrantos,

cuando llorar no es la salida,

cuando crear una imagen que imagino

me lleva por la tortura del placer en un camino...

que me quema y sigo caminando

y sigo y sigo y sigo...

así...así ...así como te digo

así cómo te cuento,

tan despierto cual dormido

y si duermo me despierto

ya será en un desierto...

o cubierto por tus brazos

que se aferran a mi pecho

y en un verso a ti me estrecho

donde vuelco, este amor, que raya en la locura

y mi alivio es un segundo...

que hace el tiempo de mi mundo

minutero sin el rumbo

que señala la distancia

tan distante ...pudiendo oler tu fragancia

la que nunca me trae el viento...

ni algún frasco de cristal...

 

Es solo nada y más

un sincero amor celestial

que esperando en su sitial

no te niega el sentimiento

siendo cruel aquel momento

de una hora que imprecisa

cada día es quien me avisa

que desnude ya mi cuerpo

por si acaso es el acierto

de soñar con este cuento

que dormido o bien despierto

es tu amor que me ha cubierto

del espanto verdadero

porque simplemente quiero

en tu vida, amor y sueño

y abrazar tu cuerpo entero

que hace mar mi don sincero

sin quitar el todo y nada

de mi mar desesperada

y en mis ojos la mirada

con mi esencia enamorada...

 

Autor: Mario Rodolfo Poblete Brezzo

Randoc Nadino