Lo más extraño y azorante de esa circunstancia o mundo, en que tenemos que vivir, consiste en que nos presenta siempre, dentro de su círculo y horizonte inexorable, una variedad de posibilidades para nuestra acción, variedad ante la cual, no tenemos más remedio que elegir y, por tanto ejercitar nuestra libertad. La circunstancia del aquí y ahora dentro de los cuales estamos inscritos y prisioneros, no nos impone en cada instante, una única acción o hacer, sino varias posibles y nos deja de forma cruel, entregados a nuestra iniciativa e inspiración, por lo tanto a nuestra responsabilidad. Ya lo comentó nuestro escritor Ortega y Gasset.\"Somos nosotros mismos, pero inmersos en las circunstacias\".