Dicen que las mujeres no mienten
yo digo que esos engañan,
la calle que se hace añicos
el portal de sus recuerdos
los sentimientos en sus senos muertos
la mujer es un puñal frío
acero damasquino
en este mundo citadino
Sus promesas son claveles
que se clavan en el alma
sus palabras, sus pupilas
sus miradas de cristal,
palabras gentiles, seductora odalisca
que de amor me hablaba
mientras corría la hiel entre sus labios
con candado que cierran los ojos
envenenan con la miel de sus sueños
y se agarran con saña del cuello
almidón de sus recuerdos,
que a este plumero han dejado enfermo
Decía ella, que me quería,
juraba amor eterno mientras
teñía de negro el tulipán que
siempre fue morado, que siempre fue
oscuro como su sórdida mirada
que me dejo el ala rota de un viento
que solo suspiro imaginado fue
que no se escuchó, que sentí
al perderme, al encontrarla
por última vez, en el balcón
sonriendo desde abajo,
sonrisa
El tiempo me ha demostrado
que el amor es ese sabor agridulce
a llantos que te dejan derramado
así como el oro, todo se desluce
Las historias rotas en el sofá
sus corpiños en el gabán
las noches sin sueños,
en su cuerpo de mis besos el desvelo
el rumor ahogado de sus suspiros
el temblar de sus piernas,
el de mis palabras al amarla
la vida entre sus dedos
la mía, sin su presencia,
de sus cabellos mi cielo teñido
Los callares de sus azahares
el caminar de mis azares
el soliloquio del alma,
tirada ridícula la esperanza
destejida en la cama,
nostalgia colgada de la cortina
con mi cuello y el habano
ambos unidos por una guillotina
Las noches tirados, en el jardín
el velo de sus curvas
el vaivén de sus caderas
la voluble mujer de puras ilusiones
el suspirar de sus gemidos en mi oído
y el llanto reprimido, un quejido
abandonado el tono carmesí
el do mayor de su silencio
el rosa pastel de las rosas
que me regaló
con el dinero que él le dío,
el romanticismo acostado en el lecho
el cuerpo del delito, ella en brazos
de un perfecto desconocido
de un gran “amigo” mío…
de un Morfeo que no es divino
pero que mato a Eros,
como ella me mato
como ella,
con ella
el amor
acabó