Hablan mal de otros sin confrotarlos; pero, los perspicaces los descubren e ignoran, los que les hacen caso, se convierten en sus iguales por intención o estupidez
Quiénes no dejan que les comenten, sería necesario que ellos mismos no lo hiciesen
Quién puede confiar en un plagiador. No faltan los aturdidos, los tergiversadores, los dueños de la verdad, los desviados, los acosadores, en fin, diversas calañas. Son minoría
Los aduladores sobran, pues dañan
(Ella me dijo que ella no era ella, le pregunté entonces, ¿quién eres?, una penumbra me contestó y ¿tú? el que cree amarte, pero si sólo eres una silueta ¿dónde está tu yo verdadero? no muy lejos en una ciudadela detrás del bosque)
Por qué hablamos
de desconocidos,
cuando todos somos los mismos;
van a la guerra
como rebaños al matadero,
¿les importa?
sí, sin duda,
entonces ¿qué?
es que somos indistintos;
cuando lleguen los alienígenas
comprenderemos
que no son diferentes a nosotros;
lo serían si viniesen de universos
inperceptibles
- inexistentes-