GDA

QUE EN NUESTRAS LLAMAS DE AMOR DESVANEZCAMOS NUESTRAS OSCURIDADES

Ámame, ser de belleza, en tus horas sin compañía,
ámame en tus lapsos de inmortalidad,
en tu mutismo, ámame con constancia,
en mi ausencia, de día y de noche,
en la calidez de los versos de tu alma,
la que con bondad descongela las aguas que te ahogan
dentro de la añoranza, el desasosiego y la angustia…
si las andanadas a tus pensamientos arriban
cobíjate en mi amor que no perece,
tú bien sabes, mi bien, que te amo,
que te recibo férvidamente con afán y efusión
divinamente ya que esta forma de mi entrega muestra su autenticidad,
no temas, que mi alma junto a tu alma va,
disípate en la eteriedad de los ósculos
que con sutileza fraguan nuestras integridades en fidelidad,
y ámame, mi ser alado, que en nuestras llamas
de amor desvanezcamos las oscuridades.