In Memoriam Braulia Sotelo
Me pregunté si
ella distinguía mi voz,
en el coro de arterias que cantaban
en las cámaras de su corazón,
cuando movía los ojos,
bajo el velo de su sueño lejano,
después de que le susurré al oído
que volveríamos al lago,
donde vio crecer el loto,
para inhalar las olas del viento húmedo
y reír, como viejos amigos
sorprendidos por el Sol,
al despertar.
HuGóS | 11-9-2024 | 8:51 p.m.