El verso, es una flor en su pujanza,
es color, es promesa, es aventura,
es río, es mar crecido en su bravura,
es el rito sublime de la danza.
El verso, es un retoño en primavera,
es el fruto en la higuera de los huertos,
rosas con pétalos marchitos, yertos,
es raíz que da vida a la quimera.
Es llanto de la rama del olivo
que su fruto cortaron tempranero,
es aroma, es fragancia de romero,
jaula abierta del pájaro cautivo.
Es recuerdo del tiempo transcurrido,
primer rayo de sol del mes de enero,
es la tinta reseca en un tintero,
es la carta arrugada en el olvido.
Es la letra que suple a la palabra,
abrazo que jamás se dará en vida,
es presencia de siembra empobrecida
del surco que en la tierra nadie labra.
Es placer de la madre que ha vivido
después de nueve meses de embarazo
la dicha de arrullar en un abrazo
el fruto de su amor recién nacido.