El Reloj Sin Manecillas
Quisiera ser como el reloj,
y sus manecillas,
un tiempo inmutable,
sin números ni agujas.
Solo un latido constante,
un eterno presente.
Así no jugaría
a la carrera de la vida,
no me apuraría,
no me agotaría,
permanecería en el ahora,
un instante infinito.
Como una memoria,
donde el pasado se desvanece.
De la vida intensamente,
como un latido constante,
buscando alcanzar
ese tren que se me escapa.
Ese colectivo perdido,
porque no he llegado a horario,
¡como quisiera!
para poder llegar a tiempo,
a cada lugar y
cumplir con cada obligación.
Como las plantas,
que crecen sin prisa,
transportándose a través
del tiempo,
enraizadas en el presente,
con la mirada en el futuro.
Aún sin este reloj,
sin manecillas,
Y en cada latido del corazón,
sin el tic tac del reloj,
el tiempo se convierte en poesía.
Un instante infinito,
un eterno presente.
Autor: Antonio Pais