Pájaros vuelan hacia un retorno espeso;
Versos que inauguran primaveras
Emigran hacia otros horizontes,
Mientras la lluvia cae en mi cartilla
Con espesas lagrimas que desafían al tiempo
En un retorno inhóspito de vientos.
La rueda de los sentidos está empantanada
Y los rieles de los lamentos suplican
En los encontrados caminos del destino,
Donde una flora colorida mente gutural
Va dando cuenta de las existencias
Que van royendo silenciosamente las ansias.
En los epitafios agrestes de los creyentes
Las voces se comunican entre lágrimas
En un ejercicio del dolor que suma gente
En las despedidas amargas de los días
Que están mirando el porvenir
Con una esperanza, que no florecerá nunca.
Allí, entre los renglones encriptados
Fluyen las voces antiguas de los entes
Que han aflorados los mejores versos
A costa del dolor de sus almas,
Que yacen solitarias a la orilla del mar
Esperando una redención mayor.
Son los digitadores de las comas y puntos
Que han puesto de relieve el mar
Con una asimétrica ordenanza de sueños
Que crispan la lluvia que el atardecer
Ha dejado como lamento solitario
De los poetas que nunca llegaran al cielo…