Bajo el Misticismo del Amor.
En tus ojos arde un fuego quieto,
y mi alma, presa, no puede escapar,
el amor se enreda, puro y secreto,
como la sombra que no sabe cesar.
Tus manos son la senda y el abismo,
donde mis pasos temen tropezar,
pero, aun así, sigo este misticismo,
sin saber si vuelo o voy a caer.
Bajo la luna, calla el destino,
en tus labios mi vida es un cantar,
y entre susurros, como un divino,
el amor se queda, dispuesto a reinar.
A ti Magdalena. 01 01 2021