Omar Alejandro Flores

Touch and go

maravillado

y afanoso en la penumbra de su voz,

el hombre se aproxima a la carrera

       con 

heterogéneo

       ritmo: 

toma su mano, 

la trabaja un resto singular 

y le promete 

       el cielo:

         solo

    por mitades,

pero a su antojo.