Tu cabeza en la cabecera,
la mía a tus pies.
Nuestro reflejo nos muestra
completos, desnudos.
La blancura de mi piel
favorece tu tono.
Ropa revuelta por el suelo.
El calor de nuestros cuerpos
huele a nuestras respiraciones.
Luego ya no estás,
esto es solo un recuerdo.
Los meses han pasado.
Al recordarte siento culpa.
Duele cuando el velo de la oscuridad me arruya.
Mantengo la luz prendida.
Tu recuerdo es el monstruo debajo de mi cama.
¿Cómo liberarme de este dolor que me ata?
CNLC