Despierta tu aroma del aire los secretos,
susurro que danza entre hojas y papel
perfume que se cuela en el alma primero
y al roce en cada paso canta con él
Olor a primavera que nunca termina,
a flores que no conocen ninguna marchitez,
cálido rincón donde resiliente el tiempo pasa,
y encuentra el día su refugio a la vez
Aroma que aún en lontananza se define,
lo efímero y lo eterno producen embriaguez
suspiro que en el viento queda enamorado
como si el mismo universo me llamara también.
Cada gesto tuyo la distancia perfuma,
cada palabra deja un rastro de miel;
aunque el aire lo lleve muy muy lejos, regresa a mi lado una y otra vez,
impregnada queda mi conciencia de hombre
como un poema escrito con fragancia de piel No es solo un aroma, es toda tu historia,
como sutil regalo de la rosa al clavel
Cuando en silencio ahora yo te pienso,
una brisa menciona tu nombre bebé
me recuerda que la belleza verdadera respira y se vive de ella también.
Justo Aldú
panameño
Derechos reservados /noviembre 2024