En el jardín de tus sueños,
florecen estrellas,
sus pétalos de luz,
iluminan mis huellas.
Tus ojos,
dos lunas en un cielo invertido,
reflejan un mar de secretos escondidos.
Eres el sol que danza en un espejo roto,
la melodía que nace en un silencio remoto.
En el laberinto de tu amor me pierdo,
cada paso es un misterio que descubro y recuerdo.
Tus palabras son ríos de tinta dorada,
que fluyen en mi mente,
creando una balada.
Tus caricias, pinceladas en un lienzo etéreo,
pintan paisajes de un amor sincero.
En el reloj de arena de tus besos,
el tiempo se detiene,
se vuelve eterno.
Tus abrazos,
constelaciones en mi piel,
dibujan mapas de un amor fiel.