Santiago de Compostela
Donde nació Rosalía
En una casa de piedra
Cuando la lluvia caía
En una mesa de piedra
Donde su canto escribía
Frente al agua de la fuente
Con lágrimas y morriña
También le escribía al mar
En su soledad, la lluvia
Los hórreos llenos de granos
Entre pinos y silveiras
Siempre le cantó a su tierra
Con más penas que alegrías
Entre eucaliptos verdosos
Una muñeira se oía
Cantó a la mar, a los montes
A fuentes, lluvias y rías
Al llegar la alborada
Su rostro se entristecía
Su vida atormentada
Cuando de pena sufría
La gaita la acompañaba
La lluvia la estremecía
En una barca de sueños
De ilusiones y alegrías
Escribiendo sus cantares
Llena de melancolía
Remando entre sus aguas
A las olas les decía:
¡Mis ojos se están quemando!
¡Cuando declinan los días!
¡Y llegan las negras sombras!
¡A llevarse el alma mía!
Follas novas y cantares
Desde su barca escribía
Con la mirada en el mar
En la lluvia y en sus rías
Cuando cantas a Galicia
Se oye el rugir de tus rías
Padrón, su lecho de muerte
Suspirando ella decía:
¡Abre la ventana!
¡Que quiero ver el mar!
Poco después fallecía
Galicia quedó sin ti
Sin ti quedó, Rosalía
Escribirás desde el cielo
Al mar, al monte
A fuentes, lluvias y rías
¡Adiós, adiós Rosalía!
Adiós ríos, adiós fontes
Adiós regatos pequenos
Adiós vista dos meus ollos
Non sei cándo nos veremos
¡Adiós, adiós……. Rosalía!